Guía para cuidadores de adultos mayores

Como saber si necesitas contratar a un cuidador?
 

Es probable que tu ser querido  ya tenga varios cuidadores en su vida, pero es posible que te estés preguntando si ha llegado el momento de establecer un acuerdo formal con un cuidador regular.

Signos de que tu ser querido necesita un cuidador regular:

Señales del adulto mayor:

• Disminución en la higiene personal

• Nuevas lesiones o condiciones de salud

• Ausencia de alimentos frescos en la casa

• El hogar está en condiciones insalubres

• Sentimientos de aislamiento o depresión

• Atraso en el mantenimiento rutinario del hogar y el pago de las facturas

Señales sobre el familiar:

• Estas constantemente preocupado por su bienestar

• No tenes tiempo físico dado tus otros compromisos para comprometerte al cuidado de tu ser querido.

Otras señales:

• Su medico, personas cercanas te comentan que necesita de ayuda externa.

 

Responsabilidades y tareas de un cuidador

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Los cuidadores realizan tantas tareas como la situación requiera. Algunas responsabilidades comunes, que pueden cambiar con el tiempo, incluyen:

• Mantenimiento del hogar: limpieza, trabajos de jardinería y reparaciones sencillas

• Planificación del cuidado: elaborar un plan de cuidado para su ser querido con la ayuda de todo el equipo de atención médica

• Defensa médica: asegurarse de que su ser querido reciba el cuidado adecuado y sea tratado de manera justa

• Gestión de medicamentos recetados

• Ayuda con las actividades de la vida diaria

• Preparación de comidas y nutrición

• Transporte Compañía

• Gestión financiera: pagar facturas, hacer presupuestos y monitorear cuentas bancarias

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Como elegir un cuidador

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Un cuidador pasará mucho tiempo con la persona mayor que recibe atención. Por eso, es importante encontrar a alguien cuya personalidad sea compatible con la de tu ser querido. ¿Tu ser querido es extrovertido y hablador? Elige a un cuidador que disfrute de las conversaciones. ¿Son más reservados? Opta por un cuidador que sea más tranquilo.

Otros factores que debes considerar al contratar o elegir a un cuidador incluyen:

1. Experiencia: Busca a alguien que tenga experiencia cuidando a personas con necesidades similares a las de tu ser querido.

2. Formación: La formación puede ser un indicador de un cuidador de calidad. Los asistentes de salud en el hogar certificados reciben formación formal para aprender a ayudar con las actividades de la vida diaria. Otra formación a tener en cuenta incluye RCP (resucitación cardiopulmonar) y primeros auxilios básicos.

3. Confianza y Fiabilidad: Los cuidadores asumen mucha responsabilidad, así que necesitas a alguien en quien puedas confiar. Necesitarás a alguien que cuide adecuadamente de tu ser querido, llegue a tiempo, respete el hogar en el que están, admita si comete un error y solo registre las horas trabajadas. Antes de contratar, verifica referencias y realiza una verificación formal de antecedentes.

4. Vacunas: Por seguridad del adulto mayor y del cuidador, es posible que insistas en contratar a una persona que esté vacunada contra la influenza, culebrilla, neumonía, tuberculosis y/u otras enfermedades transmisibles. 

5. Elige un Cuidador Asegurado y Garantizado: Las agencias de atención domiciliaria con licencia que están aseguradas y garantizadas pagan por la protección en caso de que los empleados sean responsables de daños, robos u otras pérdidas financieras para sus clientes.

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Cual es la diferencia entre un cuidador y un enfermero?

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Algunos adultos mayores necesitan un nivel de atención más elevado del que un cuidador puede proporcionar. Ahí es donde entran las enfermeras registradas de atención privada. Las enfermeras y los cuidadores difieren en tres aspectos principales. Comprender las diferencias es fundamental para contratar la ayuda correcta.

1. Responsabilidades : Las enfermeras registradas brindan atención médica a sus clientes. Esto podría implicar monitorear signos vitales, cambiar heridas, insertar y mantener catéteres, administrar medicamentos o brindar cuidados al final de la vida. Los cuidadores ofrecen cuidados no médicos como limpieza, compañía y ayuda con las actividades de la vida diaria .

2. Educación y Formación

   • Las enfermeras necesitan al menos un título asociado en enfermería y también deben aprobar un examen de certificación para convertirse en enfermeras registradas. Mientras obtienen su título, las enfermeras completan horas clínicas, que implican trabajar directamente con pacientes y aprender de enfermeras en ejercicio.

   • Los cuidadores, como familiares, asistentes personales de cuidado o asistentes de salud en el hogar , no necesitan formación formal. 

3. Costo

   • Contratar a una enfermera registrada para el cuidado en el hogar cuesta mucho más que contratar a un cuidador no médico. 

   • Un cuidador suele ser suficiente para adultos mayores que solo necesitan ayuda con el cuidado personal, la administración de medicamentos y otras tareas básicas del hogar Las enfermeras registradas son ideales para adultos mayores que:

     • Tienen diabetes

     • Tienen discapacidades físicas graves

     • Tienen problemas cardíacos

     • Han sufrido recientemente un derrame cerebral

     • Han tenido una cirugía reciente

     • Necesitan atención de enfermería especializada continua para gestionar una lesión o enfermedad